Si hay una formación “de las de toda la vida” que ha permanecido fiel a sus principios y razones de ser, esa es sin duda Pet Shop Boys. Uno de esos proyectos que nunca da un ruido más allá del plano musical, pero que aquello que da, suele cumplir… al menos con las expectativas de sus fans.
Y es que, pocos proyectos con 25 años a sus espaldas pueden presumir de no haber defraudado prácticamente nunca a sus seguidores, y uno de ellos es el de Neil Tennant y Chris Lowe.
Ellos son de esa extraña clase de artistas que saben aplicar un mínimo de evolución a su trabajo y, a la vez, seguir sonando como siempre lo han hecho; lo cual ayuda a que nadie los tilde de traidores ni de anquilosados en su sonido.
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